Muerte de Emiliano Zapata y Francisco Villa – Posrevolución 1917-1934. Zapata había montado el Alazán que Guajardo le regalara apenas un día anterior y penetro en el patio de la hacienda seguido tan solo de una escolta de diez hombres.

La guardia estaba formada y pareció preparada a hacerle honores, al tocarse el clarín 3 veces a la llamada de honor y al apagarse la ultima nota, al llegar el general en jefe al dientel de la puerta al quemarropa.

Sin dar tiempo para empuñar las pistolas , ya que los soldados habían presentado armas descargaron dos veces su fusiles y el general Emiliano Zapata cayó sin poderse levantarse.

En la mañana del 20 de julio de 1923 el ex-jefe de la división del norte se dirigía de parral hacia su hacienda de Canutillo.

Iba manejando su propio auto, cuando le fue lanzada una terrible descarga de fusilería sobre su vehículo y murió instantáneamente así como sus acompañantes.