Revolución científica – Introducción a las ciencias sociales
Haciendo un poco de historia, tenemos que en el año de 1939 el historiador de la ciencia y filósofo francés de origen ruso Alexandre Koyré, es el encargado de que por primera utilizar el término revolución científica, ya que la mayor parte de los historiadores afirmaban que la revolución científica se extiende a lo largo de los siglos XVI y XVII, esto es desde Copérnico hasta Newton.
Algunos científicos consideran los periodos de tiempo menos extensos y ubican a la revolución científica en el siglo XVII, otros por el contrario proponen periodos más prolongados a partir del siglo XVIII.
Con la revolución científica se consolidaron las nuevas teorías en el terreno de la física (newtonismo) y posteriormente de la biología (darwinismo), estas teorías son muy importantes para la explicación de los fenómenos y hechos del mundo orgánico e inorgánico.
Surgió la posibilidad de explicar la realidad mediante leyes y formulas matemáticas, se produjo una gran expectativa, la ciencia comenzó a ocupar un lugar central en el progreso humano, ya que se basa en la razón y en el método científico para comprender y transformar el mundo.
El nuevo espíritu científico, basado en la razón científica (teoría filosófica que ubica al ser humano en el centro del universo), se trasladó a las ciencias sociales bajo la idea de que, si las ciencias naturales eran el reflejo del mundo, las ciencias sociales tendrían que ser el reflejo de la realidad social, los principales cambios que se produjeron en esta etapa fueron:
