Hernán Cortes Incendia las Embarcaciones en la Conquista de México, con el fin de que ninguno de sus capitanes o hombres no pudieran regresar a la isla y pudieran seguir adelante.
Su finalidad era no seguir las ordenes del gobernador de cuba y no compartiría sus riquezas con el.
Pues Moctezuma se había enterado rápidamente de la llegada de los españoles, por superstición creyó que la profecía que conocía sobre que [Quetzalcóatl regresaría], había enviado representes cargados de ricos presentes de oro y plata.
Por dichas reliquias, Hernán Cortes se da cuenta de las riquezas que se encontraba en dicho territorio, su decisión valió cubrirse de gloria y riquezas con el consentimiento del monarca español.