La Catedral de Orvieto en la Arquitectura Gótica y el Arte, comenzó en el año de 1290 con estilo románico y concluida con estilo gótico, famosa de los monumentos de Orvieto.

Una de las Principales características de esta construcción es que los muros presentan franjas de mármol blanco y negro.

Su fachada que se termino en el siglo XVI tiene la forma de un gigantesco tríptico adornada de ricos mosaicos, intrincadas esculturas y un bello roseton, dicha obra sobresalientes entre los artistas de Andrea Pisano y Andrea Orcagna.

En su interior alberga varias capillas famosas especialmente la Cappella Nova, con sus famosos frescos del Juicio Final que fue realizado por Luca Signorelli. Para el año de 1447 Fra Angelico punto los frescos restantes junto con su discípulo Benozzo Gozzoli.