Las micosis superficiales, también conocidas como dermatofitosis, son infecciones fúngicas que afectan las capas superficiales de la piel, las uñas y, en algunos casos, el cabello. Estas infecciones son causadas principalmente por hongos dermatofitos, que tienen afinidad por la queratina, una proteína presente en la piel, las uñas y el cabello

Se conocen con el nombre de tiñas. Son micosis superficiales que afectan la capa cutánea (incluso de la cabeza), zona inguinocrural, manos, uñas, pies, corporal y barba.

Características:

• Las dermatofitosis pueden manifestarse de diversas formas, como tiñas (tinea corporis), tiña del pie (tinea pedis), tiña inguinal (tinea cruris), tiña del cuero cabelludo (tinea capitis) y onicomicosis (infección de las uñas).
• Los hongos dermatofitos que causan estas infecciones incluyen especies de géneros como Trichophyton, Microsporum y Epidermophyton.
• Las micosis superficiales suelen ser contagiosas y pueden propagarse de persona a persona o a través del contacto con superficies contaminadas, como suelos, toallas o ropa infectada.
• A menudo se asocian con síntomas como picazón, enrojecimiento, descamación de la piel, fisuras, engrosamiento de las uñas y pérdida de cabello en las áreas afectadas.

Causan patologías crónicas:

La tiña de los pies se conoce como pie de atleta. Es una infección causada por el hongo Cándida albicans, el cual afecta la zona de piel localizada entre los dedos. Es común en climas cálidos y húmedos, más frecuente en adultos, varones, en especial por el uso de calzado deportivo y en personas diabéticas.

La tiña, una infección fúngica de la piel, puede presentarse de diversas formas:

1. Intertriginosa: Se localiza entre los dedos, causando picazón, sequedad y pequeñas grietas. Tiende a volverse crónica con el tiempo.
2. Hiperqueratósica: Se manifiesta en la planta del pie con acumulaciones de queratina, similar a callosidades. Puede haber grietas dolorosas y con sangrado, además de picazón.
3. Vesiculosa Aguda y Subaguda: Se caracteriza por la presencia de vesículas llenas de líquido transparente que se rompen y dejan cicatrices. Pueden ser dolorosas, sangrar y causar picazón.

La tiña en las manos presenta las mismas formas que la tiña en los pies, aunque predomina la presentación hiperqueratósica.

Además, existen otras formas de tiña:

1. Tiña del Cuerpo: Se localiza en la piel sin vello, comenzando como una mancha roja y escamosa que se extiende hacia afuera. Puede ir acompañada de picazón.
2. Tiña Inguinocrural: Se desarrolla en áreas húmedas, como la entrepierna, debido a la acumulación de humedad, lo que favorece la instalación de los hongos.
3. Tiña de las Uñas: Más común en los pies y en personas con historial de pie de atleta. La uña afectada se vuelve quebradiza y seca, comenzando con picazón y afectando la apariencia.
4. Tiña de la Cabeza: Más común en niños y tiende a desaparecer en la pubertad debido a cambios en la piel y el pH. Se presenta con descamación y picazón intensa.
5. Tiña de la Barba: Afecta la cara, el cuello, la barba y el bigote. Aunque es poco común en México y más frecuente en Europa, su presentación es similar a la tiña de la cabeza.

Prevención en Ciencias de la Salud: La prevención de las micosis superficiales se centra en medidas de higiene personal y ambiental, así como en la educación sobre prácticas seguras para evitar la transmisión. Algunas estrategias de prevención incluyen:

1. Mantener la higiene personal: Lavarse regularmente las manos y el cuerpo con agua y jabón, especialmente después de actividades que pueden aumentar el riesgo de exposición, como el contacto con animales o superficies contaminadas.
2. Evitar el contacto con superficies contaminadas: Evitar caminar descalzo en áreas públicas como piscinas, gimnasios o vestuarios.
3. Uso de ropa limpia y seca: Cambiar la ropa y las toallas regularmente, especialmente después de actividades sudorosas.
4. Evitar el intercambio de artículos personales: No compartir objetos personales como toallas, ropa, calzado, cortaúñas u otros objetos que puedan propagar la infección.
5. Mantener un ambiente limpio y seco: Promover la ventilación adecuada en áreas húmedas y secar adecuadamente los objetos susceptibles a la humedad, como calzado y ropa de cama.
6. Consulta médica temprana: Buscar atención médica si se desarrollan síntomas de micosis superficiales para un diagnóstico y tratamiento oportunos.

La prevención juega un papel crucial en la reducción del riesgo de contraer micosis superficiales y en la interrupción de la transmisión de estas infecciones. La educación sobre prácticas preventivas y el acceso a la atención médica adecuada son componentes clave en la gestión de estas infecciones cutáneas.

La prevención de la tiña es clave para evitar su propagación. Mantener una buena higiene es fundamental: tomar baños regulares y cambiar la ropa interior ayuda a evitar que los hongos se multipliquen. Es importante también evitar la ropa ajustada, ya que crea un ambiente propicio para el crecimiento de los hongos.

Dado que los hongos prosperan en ambientes húmedos, es crucial secarse completamente después de bañarse para permitir que la piel se ventile antes de vestirse. Además, la ropa que haya estado en contacto con la tiña debe lavarse con agua caliente y preferiblemente con jabón fungicida para eliminar cualquier hongo presente.

Por otro lado, existen otros tipos de infecciones fúngicas, como la cromomicosis, que afecta la piel y el tejido subcutáneo, causando la formación de nódulos, verrugas y placas verrucosas. También hay micosis sistémicas, como la histoplasmosis y la coccidioidomicosis, que pueden ser graves y afectar los pulmones. Es importante buscar atención médica si se presentan síntomas de estas infecciones.