El Drama Moderno en las características de la comedia y el drama en literatura 2, el conocido Drama Isabelino anticipo el drama moderno surgido en el Romanticismo al llevar al escenario los ambientes, problemas y personajes cotidianos. Uno de sus principales representantes fue
Victor Hugo [1802-1885] poeta, novelista y dramaturgo francés quien mezcla el “Drama Grotesco” referencia a la irregular, grosero del gusto y lo sublime, lo terrible y lo bufonesco, lo trágica y lo cómico.
Denis Diderot [1713-1784] quien planteó la necesidad de un género “Dramático Realista” intermedio entre la comedia y la tragedia de carácter burgués que pertenece a la clase media acomodada y centrado en los problemas del hombre contemporáneo.
Lessing [1729-1781] alemán que propuso dotar a los caracteres del drama moderno el tono elevado de la tragedia clásica. A lo largo del siglo XIX se crearon en toda Europa dramas sentimentales, cotidianos y lacrimógenos que produce lágrimas sentimental, con diverso énfasis en el Patetismo es la capacidad para conmover el ánimo al infundirle dolor, tristeza o melancolía, la denuncia propia del Naturalismo y la Introspección que es la observación de los propios actos o estados ánimo o de conciencia angustiosa, como se aprecia en la obra del noruego Herik Ibsen.
El Drama se convirtió en una herramienta compleja a través de la cual la burguesía se sometió un implacable Autoanalisis, esto significa un examen de sí mismo, como en el teatro del Pidello de Valle-Inclá de Chéjov en el drama irlandés o en el teatro absurdo.
En el siguiente imagen podemos apreciar el fragmento de El Jardín de los Cerezos de Chéjov que se aprecia el autoanálisis e introspección: