La institución creada en España por la Corona española para controlar las posesiones y recursos que adquirían de las Américas fue la Casa de Contratación de Sevilla, que fue creada en 1503 para organizar, regular el comercio colonial y otorgar licencias para la exploración y colonización de las Nuevos territorios. Posteriormente, sus facultades se ampliaron hasta convertirse en el principal organismo rector del comercio y el único autorizado para recibir y administrar riquezas de los Estados Unidos, interviniendo en la regulación de las operaciones comerciales y actividades de navegación.
La hacienda real, por su parte, se encargaba de recaudar impuestos, que incluían las contribuciones personales de los indios, los diezmos de la iglesia y el almojarifazgo. Para lograr esto de manera efectiva, la familia real española estableció una red de tesoros reales en importantes centros administrativos, puertos importantes y los distritos mineros más ricos o poblados. Como parte de estas redes se fundó la Real Caja de México en 1521, luego Veracruz en 1531, Yucatán en 1540 y Guadalajara, Zacatecas, Acapulco, Durango y San Luis Potosí de 1543 a 1628.
Durante el Virreinato de la Nueva España, varias instituciones económicas importantes jugaron un papel vital en la economía de la región. A continuación se muestra una descripción general de algunas de las principales instituciones financieras:
Casa de Contratación: Fundada en 1503, la Casa de Contratación supervisó el comercio entre España y sus colonias. En Nueva España, la Casa de Contratación estableció un monopolio comercial para la corona española en el área, lo que significa que solo podían comerciar con España y solo a través de la Casa de Contratación. También se encarga de los pagos de impuestos y aduanas.
Real Auditorio: El Real Auditorio es el palacio de justicia encargado de administrar justicia en la Nueva España. Su tarea es también monitorear la actividad económica y financiera en esta área. La Real Audiencia se encarga específicamente de regular los precios de los productos y supervisar las transacciones comerciales.
Tribunal Consular: El Tribunal Consular fue establecido en 1592 para regular el comercio y la actividad económica en la Nueva España. Sus funciones incluyen formular regulaciones comerciales, monitorear el comercio y resolver disputas comerciales.
Casa de Moneda: Casa de Moneda fue fundada en 1535 para acuñar monedas en la Nueva España. También es responsable de regular el valor de las monedas y fijar los tipos de cambio.
Cámara de Cuentas: La Cámara de Cuentas supervisa las cuentas y los gastos públicos en la Nueva España. Sus responsabilidades incluyen auditar las cuentas del Gobernador General y otros funcionarios públicos y supervisar el gasto del gobierno general.
Juntas, estas agencias juegan un papel importante en la economía de la Nueva España, estableciendo regulaciones y supervisando la actividad comercial y financiera en la región.