Los Canales de Havers son conductos pequeños que se encuentran en el corte transversal de los huesos de 100 a 200 micras de diámetro, ya que los huesos largos son paralelos y se comunican en función a esto se llama Anastomosis.
En dichos canales es donde llegan los nervios y también los vasos del periostio, ya que a su alrededor se encuentran dispuestas céntricas laminillas que se puede apreciar machas negras, además de que tiene pequeñas cavidades que son llamadas Corpúsculos Óseos.
En un Corpúsculo óseo se encuentra una célula que es llamada Osteoblasto, que se segrega la osteía y las sales calcáreas que estos son componentes del tejido óseo.